Los chicos crecen

-¡Cómo crecieron los chicos! – decía Alcira, la madre de Darío, recostada en su reposera una tarde a fines de Febrero.

- Imagínate, Germán ya se recibió de subteniente, parece mentira – Alejandra le respondió con algo de tristeza en la voz
- ¿En serio? – dijo mi madre - ¿Y adonde lo destinan?
- Tiene que presentarse en Curuzú-Cuatiá el lunes – la pena de Alejandra era razonable, su hijo se alejaba de su lado -¡Me voy a quedar tan sola! El verano iba llegando a su fin. Alejandra, la madre de Germán, solía invitarnos a pasar las tardes en la piscina de su lujoso pent-house. Allí íbamos Darío, Freddy y yo... Leer